PESCA SOSTENIBLE SEGURIDAD ALIMENTARIA Y POBREZA

Directrices Voluntarias para garantizar la pesca sostenible en pequeña escala en el contexto de la seguridad alimentaria y la erradicación de la pobreza están diseñadas para apoyar a millones de pescadores artesanales del mundo, en particular en los países en desarrollo, promoviendo sus derechos humanos y salvaguardando un uso sostenible de los recursos pesqueros de los que dependen para su subsistencia.

La pesca artesanal representa más del 90 por ciento de la pesca de captura del mundo y de los trabajadores del sector pesquero –cerca de la mitad de los cuales son mujeres- y suministra alrededor del 50 por ciento de las capturas mundiales de peces. Supone una valiosa fuente de proteína animal para miles de millones de personas en todo el mundo y, a menudo sustenta las economías locales en las comunidades costeras y las que viven en las riberas de lagos y ríos. Pero a pesar de su importancia, muchas comunidades de pescadores artesanales continúan siendo marginadas. A menudo se encuentra en zonas remotas con acceso limitado a los mercados y a los servicios sanitarios, de educación y otros servicios sociales. Los pescadores en pequeña escala pueden tener dificultades para hacer oír su voz. Los pescadores artesanales y los trabajadores del sector pesquero se enfrentan a una serie de retos, desde condiciones de trabajo inseguras e insalubres y la falta de infraestructuras a la contaminación, la degradación ambiental, el cambio climático y los desastres que amenazan los recursos de los que dependen para su subsistencia. También pueden sufrir debido a las luchas de poder en condiciones desiguales y sistemas de tenencia inseguros de los recursos de tierras y de la pesca.

Las Directrices Voluntarias aprobadas en junio de 2014 tienen por lo tanto carácter amplio, y van desde medidas para mejorar los sistemas de gobernanza de la pesca y las condiciones de trabajo y de vida a recomendaciones sobre cómo los países pueden ayudar a los pescadores artesanales y los trabajadores del sector pesquero a reducir las pérdidas y el desperdicio post-cosecha de alimentos.

Extracto de nota de la FAO